webPachucawebPachuca El alcalde de Pachuca, Alberto Meléndez, junto con su esposa y el representante de Asuntos Económicos del Estado de Hidalgo (México) estuvieron este fin de semana en Ponferrada con el fin de relanzar el Hermanamiento que ambos ayuntamientos firmaron hace seis años y que sirvió para que Ponferrada financiara una escuela en uno de los barrios más desfavorecidos de esta ciudad mexicana que cuenta con 400.000 habitantes y un pasado minero de oro y plata.
El acuerdo alcanzado por ambos mandatarios consiste en la financiación de una nueva escuela infantil que se construirá el año próximo.
El alcalde hizo de anfitrión llevando a los museos de la ciudad, el Castillo y Las Médulas durante el fin de semana.
Estas fueron las palabras del alcade en el Salón de Plenos, donde estuvieron, además de la Corporación actual, Miguel Angel Fernández, de Izquierda Unida, y Tarsicio Carballo, del PRB, que en 1998 viajaron a México:
Señor Presidente Constitucional del Ayuntamiento de Pachuca. Señoras y señores,

Mis primeras palabras tienen que ser necesariamente de bienvenida a usted y a toda la delegación mexicana que le acompañan hoy en Ponferrada. Espero que en esta corta estancia en nuestra tierra se hallen como en su propia casa. No debería ser difícil ya que somos ?un poco parientes? ponferradinos y pachuqueños desde el hermanamiento de 1998.
Para un mexicano España es como su casa, y otro tanto se podría decir de un español en México. Los lazos que unen ambos pueblos son tan estrechos que hasta hablar de ?hermanamiento? podría parecer redundante.
Desde los tiempos del Virreinato a la actualidad, pasando por el honroso gesto de acogida a los refugiados de la Guerra Civil, el camino que media entre ambos países ha estado ocupado continuamente por pasajeros en ambos sentidos. Y muchos son los ponferradinos de México y, sobre todo en los últimos años, los mexicanos de Ponferrada, contribuyendo todos a conocernos y entendernos mejor.

Señor Presidente,
La Ponferrada que les acoge hoy es una ciudad próspera, en crecimiento, en una comarca que está sabiendo aprovechar sus oportunidades industriales y agrarias, que está dotada de unos servicios de calidad que están favoreciendo que podamos superar la crisis del monocultivo del carbón desde los años ochenta.
Como sabe, Ponferrada es una ciudad que tuvo su gran expansión en el siglo XX gracias a la minería del carbón y del hierro. Heredamos un subsuelo rico en minerales, no en vano los romanos hace dos mil años horadaron casi todos nuestros montes para extraer el oro con el que acuñar su moneda. Esto les tiene que sonar algo a ustedes, sólo hay que cambiar romanos por españoles y el áureus romano por el Ducado de oro y el Real de plata que durante tres siglos salió de Pachuca para hacerse a la idea del significado que tuvo la extracción del oro del noroeste español.
En la actualidad la minería sigue siendo la principal fuente de empleo de la zona, pero ya no lo es tanto la del carbón como la de la pizarra, el último recurso natural en explotarse en El Bierzo, por el momento.
Nuestras calles llevan nombres alusivos a ese pasado y presente minero: Calles del Carbón, de la Plata, del Wolfram, de la Minería, Del Oro, Glorieta de la Pizarra...
Hasta hace poco más de un año aquí al lado, a las puertas de la ciudad, una enorme montaña de estériles de las explotaciones del carbón eran el mudo testigo de toda esa historia reciente. Con gran esfuerzo conseguimos retirarla, devolviéndole a la ciudad un espacio que la minería le había robado.
Hoy Ponferrada sigue queriendo ser un punto de referencia en el noroeste de la península, una ciudad industrial y de servicios equidistante de grandes polos de desarrollo como el litoral gallego, el norte de Portugal, Asturias o Valladolid.
Las infraestructuras de comunicación en los últimos años nos han hecho más competitivos y la ampliación de Europa nos ha hecho ganar más oportunidades. Cada vez hay más oportunidades de negocio y cada vez recibimos más turismo, especialmente esta Año Santo Compostelano en el que nuestras calles son una inmensa y concurrida avenida entre Europa y Santiago, como tendrán oportunidad de comprobar.
A nosotros, como Ayuntamiento, lo que nos toca es contribuir a poner al servicio de los ciudadanos las herramientas que sirvan para mejorar su calidad de vida.
Y dentro de esas herramientas también están los programas concretos de cooperación como el que nos ocupa.

Señor Presidente:

Hace seis años nuestras dos ciudades iniciaron un camino de colaboración institucional basada en la solidaridad y el apoyo mútuo. Entonces eran otras personas quienes rubricaron aquel acuerdo, Ismael Álvarez y Juan Manuel Sepúlveda Fayod, a los que hoy debemos agradecer aquel primer contacto.
Hoy nos toca a nosotros hacer valer que los acuerdos institucionales que tienen como objetivo la solidaridad y la cooperación cultural y educativa tienen vocación de continuidad. Pasan la personas, pero no las obras que ellos hicieron posible, como la Escuela que lleva el nombre de nuestra ciudad, Ponferrada.
Con la firma de esta Declaración de Intenciones el Ayuntamiento de Ponferrada quiere mantener abierto ese puente con el otro lado del Atlántico para seguir haciendo de Pachuca, nuestro municipio Hermano, el beneficiario del esfuerzo solidario de los ponferradinos.
Porque para nosotros México no es una nación más de Hispanoamérica, o Latinoamérica, como les gusta decir a ustedes. México juega un liderazgo esencial del otro lado del Atlántico que para los españoles en general y para los ponferradinos y bercianos en especial, es del mayor interés desde muchos puntos de vista.
Como país de habla hispana más poblado, con la economía más potente de la zona y miembro además del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y Canadá, México puede ser la puerta de entrada al mayor mercado del mundo para los empresarios de nuestra región. Y por qué no ha de ser Pachuca, como ciudad emergente en las proximidades de la mayor aglomeración del mundo, esa puerta a inversiones de todo tipo.
Otro tanto sucede en sentido inverso. En El Bierzo ya contamos con capital mexicano. La multinacional VITRO genera riqueza al lado de Ponferrada desde hace unos pocos años, y estamos seguros de que su experiencia puede servir para que otros empresarios se decidan a invertir aquí. Porque insisto, el camino entre Pachuca y Ponferrada es de doble dirección.

Señor presidente, los lazos entre ambas ciudades deben seguir estrechándose con el fin de seguir fomentando el intercambio de experiencias ya sea en el ámbito institucional, de la cooperación social, empresarial, cultural y universitaria (por cierto, ya tenemos más de mil alumnos en nuestro Campus, casi un sueño en 1998).

Para concluir, quiero que transmita a los pachuqueños nuestros mejores deseos de bienestar. Muchas gracias.