Espigas moviendoseEspigas moviendose La calidad del aire, y por tanto, la gravedad de los problemas de contaminación atmosférica depende de la interacción entre una serie de factores naturales, tales como la climatología o la orografía, y de una serie de factores humanos como la densidad de población, el desarrollo industrial o los transportes.

Las soluciones para evitar la contaminación atmosférica pasan por la participación y colaboración de todos los actores implicados: ciudadanía, industria y administración.

La normativa sobre contaminación de la atmósfera establece la obligación de la Administración competente en la materia, en este caso la Consejería de Medio Ambiente, de controlar los niveles de los contaminantes atmosféricos en el aire ambiente, en principio de aquellas zonas en las que se prevean posibles efectos negativos derivados de la presencia de concentraciones elevadas de los contaminantes.

La Junta de Castilla y León, a través de la Consejería de Medio Ambiente, inició en el año 1990 la instalación de una red de estaciones fijas, con la finalidad de llevar a cabo la vigilancia de la calidad del aire en diversas poblaciones de la Comunidad. Esta red de estaciones la denominamos "Red de Medida de la Contaminación Atmosférica de Castilla y León", y se diseñó e instaló con la finalidad de cumplir los siguientes objetivos:

  • Determinar el grado de cumplimiento de los niveles marcados por la normativa e informar a la población.
  • Observar tendencias sobre la evolución de contaminantes en el tiempo.
  • Determinar situaciones de alerta o emergencia.
  • Evaluación de efectos y determinación de riesgos sobre personas, otros organismos vivos y patrimonio arquitectónico.
  • Seguimiento de la difusión de contaminantes

HumoHumo Para su ejecución a partir de 1990 en cinco años, se ha implicado en este proyecto a las Administraciones Locales de dieciséis municipios de Castilla y León y al Ministerio de Medio Ambiente.
La Red de Medida de la Contaminación Atmosférica de Castilla y León responde, por un lado, a la obligación que las normas legales españolas y comunitarias, actuales y las que se prevé su próxima entrada en vigor, que imponen a la Administración en materia de vigilancia y control de la contaminación atmosférica, y por otro, a la necesaria respuesta que la opinión pública solicita de las autoridades en un terreno que está despertando el interés y la necesidad de información de los ciudadanos. En este sentido, se configura como un servicio social más.

Este equipamiento pretende, en aquellos casos donde esto es posible, entre otras cosas, ser complementario de otras redes de control que hay en Castilla y León, cuya finalidad es medir la contaminación del aire provocada por determinadas actividades industriales.


Redes de medida de la contaminación atmosférica de Castilla y León y Nº de estaciones:

Castilla y León: 29

Ayto. De Valladolid: 7
FASA Renault: 4
C.T. Compostilla: 8
C.T. La Robla: 8
C.T. Anllares: 8
C.T. Velilla: 8

TOTAL: 72


El proyecto se concibió con el propósito de dotar a Castilla y León de una red regional con el equipo más moderno posible y las características que este tipo de sistemas de medida tienen en los países más avanzados, aplicando un criterio de uniformidad en el equipamiento ya que conlleva una importante disminución de costes de mantenimiento y una gestión más eficaz.

La red de extiende en dieciséis núcleos de población de la Comunidad en cada uno de los cuales se establece una red local, en la que el ayuntamiento, si lo desea y tiene los medios adecuados, puede realizar una gestión de los datos. Cada red local está formada por un número de estaciones remotas fijas que puede oscilar entre una y siete, dependiendo del tamaño de la ciudad y la incidencia de la contaminación atmosférica.

Las poblaciones en las que han instalado estaciones de la Red se seleccionaron de acuerdo con los siguientes criterios:

  • Localización industrial potencialmente contaminante de la atmósfera.
  • Aglomeración urbana, que determine una contaminación atmosférica potencial de origen doméstico y de fuentes móviles.
  • Poblaciones de tamaño suficiente para pensar en la necesidad de un control atmosférico por razones de salud pública, sin existir a priori, problemas de contaminación atmosférica potencial.
  • Poblaciones en las que el patrimonio histórico artístico puede verse afectado por la contaminación del aire.

Según esto se han elegido 16 municipios de la Comunidad en los que se han instalado las siguientes estaciones:

  • Valladolid con siete estaciones.
  • Burgos y Salamanca cuatro estaciones cada uno.
  • Miranda de Ebro, Ponferrada y León con tres estaciones en cada localidad.
  • Palencia dos estaciones.
  • Segovia, Zamora, Ávila, Medina del Campo, Aranda de Duero, Venta de Baños, Guardo, Velilla del Río Carrión y La Robla, tienen la una estación.


sonometrosonometro En las estaciones se instalan monitores para medida en continuo de diferentes contaminantes atmosféricos, fundamentalmente aquéllos cuyo control ha sido objeto de regulación legal (partículas totales en suspensión o PM10 , dióxido de azufre SO2, óxidos de nitrógeno NOx, plomo, hidrocarburos, monóxido de carbono CO, ácido sulfídrico SH2 y ozono O3). También se han instalado unidades de medida en continuo de parámetros meteorológicos tales como temperatura del aire, presión atmosférica, humedad relativa, velocidad y dirección del viento y radiación solar, parámetros que pueden ser muy útiles para la interpretación de los datos de contaminación. Así mismo se han equipado con un sonómetro a alguna de las estaciones, habiendo sido esta la primera red de medida de la contaminación atmosférica de España que mide también ruido.

Las estaciones tienen un sistema informático que almacena los datos generados por los analizadores y las incidencias de funcionamiento de la estación. Estos datos se envían telefónicamente a los centros de procesos de datos (CPD) de los Ayuntamientos, con una periodicidad máxima de 24h. Y, posteriormente, los ayuntamientos, envían los datos al centro regional instalado en la Consejería Medio Ambiente. También es posible la comunicación directa entre la estación y la Consejería, que se lleva a cabo con regularidad en ayuntamientos pequeños o aquellos que no cuentan con los medios personales y materiales precisos, dando, de este modo cobertura técnica desde la Consejería de Medio Ambiente a los pequeños municipios.

Los CPD están diseñados para procesar la información que les llega, de acuerdo con lo indicado legalmente, de forma que, automáticamente, elaboran informes sobre las emergencias que se puedan producir. De este modo, se podrán tomar decisiones rápidamente a fin de evitar efectos negativos sobre la salud de los ciudadanos o sobre el entorno.

En el Centro de Recepción y Explotación de Datos que está en la sede de la Consejería de Medio Ambiente en Valladolid, se efectúa la gestión de los datos, que comprende comprobar la recepción de los datos y someterlos al procedimiento de validación de acuerdo con los criterios establecidos en las normas europeas y en el Manual Interno de Validación. Este Manual pretende que los criterios utilizados en esta función básica para aportar calidad a los datos, se efectúe en base a criterios preestablecidos e iguales para todos los posibles operadores del sistema. Hay que indicar que a este centro llegan los datos de redes de inmisión industriales, tras haber sido sometidos a la correspondiente validación por sus operadores.

Desde este Centro, se envían los datos a la Red Nacional a través de un centro similar del que dispone el Ministerio de Medio Ambiente, que a su vez los envía a la Unión Europea en virtud de las decisiones de intercambio de información en esta materia entre los Estados Miembro.

El control de la calidad de los datos, mencionado brevemente en párrafos anteriores, es básico para el buen funcionamiento del sistema y se lleva a cabo mediante las siguientes funciones:

  1. Mantenimiento preventivo y correctivo de la red, que conlleva:
    • Reparación inmediata de las anomalías.
    • Revisión semanal de los equipos y sustitución de fungibles.
    • Programa semanal de calibraciones de los equipos.
  2. Validación en los Centros de Proceso de Datos de los datos generados, anulándose o corrigiéndose aquellos que son erróneos. De forma resumida este procedimiento tiene en consideración las siguientes cuestiones:
  3. Tomará en consideración, entre otras cosas, perturbaciones debidas al mantenimiento, calibrado o problemas técnicos, las mediciones fuera de escala, los datos que presenten variaciones muy rápidas, como disminuciones o aumentos excesivos.
    Así mismo se revisarán lo datos de acuerdo con los conocimientos fundados de las influencias climáticas o meteorológicas propias del lugar durante el periodo de medición.
  4. Permitirá la detección de mediciones erróneas mediante técnicas como la comparación con otros meses anteriores y otros contaminantes y el análisis de la desviación estándar.
    Así mismo, se estudiará y comprobará la lista de validación elaborada durante el marcado de datos


CÓDIGOS DE VALIDACIÓN:
V: Dato válido.
O: Dato corregido.
R: Dato reconstruido.
C: Dato perturbado por el procedimiento de calibración.
Z: Dato perturbado por el procedimiento de chequeo de cero.
M: Dato perturbado por mantenimiento.
D: Dato erróneo debido a fallo técnico.
N: Dato erróneo debido a razón desconocida.
T: Dato que no ha sufrido el procedimiento de validación adecuado.


Estos códigos que deben figurar necesariamente al lado de cada dato, permiten conocer si este es valido o erróneo y la razón de esto, que por otra parte debe estar documentada en la medida de lo posible.