Caminar es una de las mejores formas de conocer tu ciudad, pudiendo parar en los sitios que quieras ver y admirando los encantos que cada esquina encierra. Caminar es el deporte que más interiorizado tenemos los seres humanos, pues para nosotros ponerlo en práctica es tan fácil y natural como respirar. No requiere ningún tipo de habilidad especial ni entrenamiento específico y puede hacerse en cualquier época y lugar.

Una buena forma física se pude obtener básicamente con caminar. Estar en forma es relajante y hasta divertido, y caminar es especialmente bueno porque no es caro, es seguro y fácil, y además se pueden alcanzar los mismos beneficios en la condición física que con la carrera, natación y bicicleta.

Lo recomendable es planificar una rutina y repetirla de tres a cuatro veces por semana. A priori, cualquier lugar es bueno si obliga al organismo a realizar una actividad física durante un tiempo determinado y con cierta frecuencia.

Para que caminar beneficie a tu organismo, debes hacerlo al menos tres veces a la semana en días alternos durante 20 o 30 minutos.

Beneficios de caminar:

  • Consumirás calorías. El constante movimiento durante la caminata implica sudar y, por tanto, ayuda a consumir calorías extras. Ese gasto calórico suplementario se traduce en la pérdida de kilos de más.
  • Mejorará tu tono muscular. Al trabajar la musculatura, ésta se refuerza y luce más definida, lo que mejora el aspecto general de la silueta.
  • Disminuirá tu grasa corporal. Y es que los músculos utilizan para trabajar la grasa acumulada, son algo así como el horno en el que la misma se quema.
  • También desciende el colesterol y presión sanguínea, lo que reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
  • Fortalecerá tu corazón. A los beneficios de la disminución del colesterol se suma que el sistema cardiovascular en sí se ve fortalecido. Lo notarás porque te cansarás menos ante cualquier esfuerzo.
  • Es un deporte sencillo y cómodo de practicar: cualquier lugar y hora son buenos. Además, es el que menos riesgo de sobrecarga implica.
  • Puede practicarse a cualquier edad, a solas o en compañía. Siempre resulta beneficioso para el organismo y si se practica en compañía contribuye a crear o afianzar vínculos sociales.
  • Reduce el estrés y aumenta la energía vital. Caminar aplaca la ansiedad que nos provocan los quehaceres diarios y nos hace sentir mucho más optimistas ante la vida. Es un gran antídoto contra los bajones anímicos.
  • Una vez que conviertas las caminatas en un hábito más, notarás cómo todas tus articulaciones y tu columna vertebral ganan elasticidad.